<$BlogRSDUrl$>

viernes, abril 04, 2003

Timing

Cuando niña odiaba la frase: “hay un tiempo para todo”. Sentía que era la excusa de los padres para frenarlo a uno:

No te puedes maquillar, eres una niña, hay un tiempo para todo. No debes manejar a esta edad, hay un tiempo para todo. No te voy a dejar salir a una fiesta taaan tarde, hay un tiempo para todo. No puedes usar el vestido de gala para desayunar, hay un tiempo para todo.

Y sí, parece que hay un tiempo para todo. Lo que pasa es que no coincide con el tiempo de los demás. Por ejemplo: me casé a los 25 y fue un escándalo porque me casé joven, pero a mis amigas solteras de más edad les dicen que ya va siendo tiempo de casarse. No tengo hijos y no pienso tenerlos en un tiempo, pero no pasa un día sin que alguien me pregunte para cuándo encargo. Si hubiese salido embarazada estarían diciendo que soy una inconsciente, que soy muy joven o que el país no está para eso. Me gusta limpiar mi casa en las noches, pero basta que mi madre venga para que a las 6 am haya que ponerse a barrer, “si limpias temprano te rinde el día”.

La verdad es amarga, pero los tiempos son relativos a las personas. Jódanse. Tendré hijos cuando quiera. Mis amigas se casarán cuando encuentren el amor de sus vidas o, ultimadamente, cuando les dé la gana. Y sí, mamá, limpio de noche porque me gusta dormir en la mañana, y mientras yo sea la que limpie seguirá siendo así.


This page is powered by Blogger. Isn't yours?