viernes, abril 18, 2003
Mi perro, el hacendoso
Después de peinar la pelambre de este animal, llena de nudos y restos de juguetes blandos (pelotas de goma y peluches pequeños), lo veo tan hermoso y limpio que suspiro y pienso que será así para siempre.
En media hora el muy cerdo ya está lleno de nuevos nudos.
Creo que en sus ratos libres practica macramé.